Esta ruta aunque esta en la provincia de Murcia para nuestro grupo tiene mucho de internacional ya que tiene un sabor a franchute, todo esto para celebrar que se nos han unido Carmen Maria y Bernal su marido, así que esta ruta la hemos realizado además Marga, Encarna, Mariajo, Amparo, Antonio y Manu.
Antes de empezar hablamos de lo bonita que esta la sierra después de una nevada como la que hemos tenido esta semana que nos deja las cumbres más altas con nieve, así que será una excursión para recordar y tener que reponer más de una culera.
La ruta empieza en la pedanía de Casas Nuevos perteneciente a Mula o Pliego y para llegar a ella cogemos la autovía desde Murcia a Caravaca y cogemos la salida de Mula y después de seguir unas cuantas redondas por la carretera de circunvalación vemos el desvió a Pliego y en este pueblo cogemos la carretera de que a unos doce km, nos acercara a la pedania de Casas Nuevas.
Empezamos desde la plaza del pueblo y nos dirigimos hacia el polideportivo que encontraremos a unos 200 metros, lo dejamos atrás para ver enseguida una pequeña zona de recreo con indicaciones de las rutas, la primera parte es común para las dos rutas, seguimos el asfalto en dirección al Morrón de la Cabra, subimos un alto y continuamos por el asfalto, hacia la izquierda, para llegar a la casa del Cura, continuamos por el camino forestal, con firme de tierra, que nos baja hacia la Rambla de Malvariche que da origen al río Pliego y seguimos hacia la izquierda, por la umbría del Morrón de la Cabra, en dirección a la Casa Forestal de Espuña Norte.de Casas Nuevas, aquí dejamos los vehículos y empezamos la ruta de senderismo, observamos que se puede realizar otra ruta que esta señalada que es la del agua, esta la dejamos para otra ocasión.
Algo más adelante en una bifurcación, el sendero se separa del GR 252 y continúa subiendo, hacia la derecha, por unos zigzag, pasando por encima del canal del Taibilla y rodeando la cara norte del Morrón de la Cabra, hasta comenzara ver la característica piedra del Almiréz, arriba a la izquierda.
Siguiendo el camino principal cruzamos el barranco de la Fuente y llegamos a un cruce donde dejamos, hacia la izquierda, el camino de la Fuente de la Portuguesa, para continuar hacia la umbría del Perona y la Hoya de la Sabina, colocándonos en la cara sur del Morrón de la Cabra, un poco más adelante ya empezamos a tener un hambre y decidimos tomar una almorza por gentileza de Mariajo que saca dos flautas de jamón con tomate que son la delicia de más de uno, podemos afirmar que en Francia también le gusta el buen jamón ya que Bernar repite con mucha satisfacción, como siempre esta la bota de Encarna que es imprescindible para acompañar el bocata de jamón
Después del descanso todo son risas y no paramos de hablar sobre todo lo que vemos, la temperatura ideal, no hay grandes subidas todo parece perfecto para disfrutar de este día, las previsiones del resto de la ruta sin problemas, así que nos acercamos a la Hoya de la Sabina, una zona muy bonita con una casa en ruinas y nieve por los campos, desde este punto nos planteamos coger un pequeño atajo para no tener que volver al camina que nos acerca a la Umbria , así que empezamos a cruzar los campos paralelo al camino que hemos dejado, pero esto os recomiendo que no lo hagáis sino os pasara como a nosotros que por confianza en el guía “ha sido radicalmente despedido”, nos ha metido a monte traviesa como si fuésemos cabras vulgaris primero una subida a un montículo para hacernos fotos y ver el magnifico paisaje desde esta altura, pero lo que no sabíamos “lo están en estos momentos estudiando nuestros abogados” fue la bajada por un barranco que más parecía un precipicio que no tenia fin ni sendero por el que transitar, hubo arañazos, se tenia que utilizar más el culo que los pies para poder ir bajando metro a metro, parecía que aquella bajada no tenia fin, después de muchas criticas escritas con sangre podemos llegar a un camino ancho que nadie tenia claro donde iba pero por lo menos nos acercaba al pueblo pero no muy rectos, hasta que llega el camino y se acaba en medio del bosque , el guia todavía tenia el descaro de seguir mirando un mapa para ver por donde seguir, pero no escarmentado por la experiencia se lanza otra vez campo través todo recto hacia el pueblo, no nos queda más remedio que seguirlo aunque sea para pegarle una paliza, porque este cobrar cobra.
Bueno este ultimo tramo tenia una pequeña senda no muy frecuentada, pero teníamos el pueblo que podíamos ver al final de la bajada, que nos lleva a la rambla que fácilmente se podía cruzar y comunicaba y en cinco minutos con la zona de recreo de donde partimos.
Nos subimos rápido los coches para acercarnos a pueblo de Pliego donde hemos reservado un asado, para hace dos horas, con patatas al horno en el restaurante Espuña “ Tel. 968002190”, este restaurante es recomendable por la calidad de su oferta gastronomita, por la variedad y por unos precios justos para lo que hemos comido.
Después de una buena comida hemos perdonado al guia hasta la próxima, hasta se hacen comentarios de lo interesante que ha sido la ruta, así que nos vemos.
Aquí os dejo un vídeo como resumen de la ruta.